Observando//No hay restricción para frenar el COVID-19 en La Paz

Por: Pepe Toño
La movilidad en el municipio de La Paz no se ha podido frenar por lo que sigue siendo uno de los problemas por lo cual no se ha evitado que el número de personas presenten sintomas o contagios del COVID-19. El gobierno municipal morenista que encabeza la presidenta Olga Medina Serrano permite la instalación de tianguis en los alrededores de la cabecera municipal, sólo evita que locales comerciales y algunos vendedores ambulantes sean retirados, en tanto sigue otorgando permisos para que los tianguis sigan con la venta de todo tipo de artículos como pulque, refacciones para licuadoras, cubetas y tinas de plástico, etc.

Las personas asisten a los mercados sobre ruedas -tianguis- sin las mínimas reglas sanitarias ni se respeta la sana distancia, incluso los asistentes acuden sin cubrebocas y los puestos carecen de gel antibacterial. en las colonias 20 de mayo, El Salado, El Pino, El Barco, entre otras se sigue permitiendo la instalación de vendedores ambulantes bajo el consentimiento del gobierno morenista.

En estas zonas ya se han registrado defunciones de personas por el COVID-19 y no se han realizado los trabajos de sanitización. Por la forma en que se les permite su instalación es porque los responsables de los tianguis son líderes de organizaciones políticas o servidores públicos de la administración, por lo cual son inmunes a las sanciones que se les debe aplicar por no respetar las medidas sanitarias impuestas por el sector salud de la federación y el estado.

El número de personas afectadas por el virus sigue en aumento en tanto el número de muertos también sigue al alza, pero en este municipio no hay quien aplique las medidas sanitarias a los comerciantes ambulantes. Sólo hay restricciones en la zona centro donde el gobierno local sabe que no todos son sus seguidores.

Pese a la contingencia de salud en las zonas altas del municipio al menos 30 mil familias de al menos 25 colonias reciben el agua potable una vez por semana y en otras ni siquiera cuentan con este servicio por lo cual tienen que adquirir el vital líquido a través de carros pipas quienes por el llenado de un tambo de 200 litros cobran entre 15 y 20 pesos.

En los cruceros de algunas avenidas del municipio se puede observar a mujeres y niños pidiendo limosna cartulinas blancas con el argumento de que carecen de alimento en sus viviendas por lo cual tienen que dedicarse a pedir dinero para poder sobrevivir, el gobierno local sólo apoya con algunos artículos de la canasta básica a familias que están en su padrón de seguidores, en tanto la demás población ha quedado fuera de todo tipo de ayuda por parte de la administración morenista.

Hay líderes de comerciantes establecidos y vendedores ambulantes que han comenzado a reunir firmas para enviar un escrito a la administración local y al estado denunciando las irregularidades que cometen los inspectores al permitir la venta de todo tipo de artículos, cuando las medidas sanitarias sólo permiten la venta de productos de la canasta básica.