Manifestaciones de ejidatarios contra la tala clandestina tolerada por la corrupción son un clamor social

Las recientes protestas y bloqueos de comuneros para exigir a los gobiernos local y federal acciones urgentes en contra de la tala clandestina tolerada por la corrupción, es un clamor social y llamada de atención de la sociedad más consciente de este flagelo que son los ejidatarios, esencialmente los dueños de los bosques de agua en la Zona Metropolitana del Valle de México, afirmó el presidente de la Comisión de Desarrollo Agropecuario y Forestal, Max Correa Hernández.

Reiteró, el problema de la tala inmoderada es la corrupción, pero con un gobierno que no sea corrupto, como el que va a encabezar la maestra Delfina Gómez, se van a generar las condiciones, los incentivos positivos para que los grupos de talamontes, dejen tener el espacio y las condiciones para destruir los bosques.

El diputado de Morena expresó “el nuevo gobierno de la maestra Delfina Gómez, podrá plantear una estrategia que incorpore a quienes se dedican a esta actividad ilegal, a que puedan tener una alternativa de ingreso económico, que les permita sostener a sus familias sin dañar el medio ambiente”.

Destacó, la autoridad y el derecho se van a imponer sin duda, así como la razón y quienes hoy encuentran ventajas en esas actividades ilícitas, van encontrar mejores ventajas si participan del aprovechamiento sostenible de los bosques, seguramente tendrán que dialogar con el nuevo gobierno.

Seguramente la corrupción los mantiene en esa posición, pero cuando ya no hay un gobierno corrupto, tendrán que generarse otros incentivos para el aprovechamiento sostenible del bosque y no para su destrucción, primero beneficiar a los que se dedican hoy de manera ilegal a la tala clandestina y a favorecer a quienes lo hacen de una manera adecuada, lo que beneficiará los bosques que hemos deforestado, dijo.

El legislador de la 4T, apuntó, “es necesaria una tregua, en la que ellos tengan garantizada su participación económica, pero de una manera legal, sostenible y conviene más que los talamontes estén dedicados a una actividad sostenible a tenerlos en la cárcel o persiguiéndoles”.

El representante popular, señaló que muchos de ellos buscan una manera de tener ingresos y no la han encontrado, no se les ha ofrecido hacerlo de una manera legal, hay que generar incentivos para que sea de manera legal, “tal como dice el Presidente de México, bajo los principios de, todo por la razón, la conciencia y el derecho y nada bajo la represión”.

A nadie le convendría, puntualizó, de tal manera que sí se exige que haya una actuación y lo que se requiere es una nueva política de aprovechamiento sostenible, sustentable de los bosques en el Estado de México, un bosque que no se aprovecha, también está en riesgo de enfermarse, de incendiarse, de ser víctima de plagas y de enfermedades.

Reiteró Max Correa, a los bosques también se les debe aprovechar, pero de una manera racional de tal manera que, con el apoyo de los profesionistas, ingenieros forestales, biólogos con los dueños de la tierra, ejidatarios, comuneros y propietarios con el apoyo de la comunidad es viable y posible que logremos que las mafias, que hoy tienen incentivos para la tala inmoderada poco a poco se retiren.