El Partido Revolucionario Institucional (PRI) no lleva prisa para elegir a su aspirante al gobierno del estado de México, dice que no le afecta los pronunciamientos adelantados tanto del PAN, Morena y PRD, el tricolor hará el nombramiento como lo marcan sus estatutos, y no por encuesta. El Gobernador mexiquense Alfredo del Mazo Maza en los últimos meses ha llevado a sus eventos a la Secretaria de Desarrollo Social, Alejandra del Moral es decir,  también se está adelantando a los tiempos electorales.

El tricolor tiene una estructura bien definida, lo que se demuestra en tiempos electorales pues vota tradicionalmente el 53% en elecciones gubernamentales, es decir, hay más de millones de personas que no votan y por los que va el PRI. En las elecciones pasadas donde perdió e o PRI; la diferencia de votos fueron los que abandonaron al tricolor y se sumaron a sus opositores.

Aunque este partido jamás ha dicho que vaya a elegir al candidato por encuesta, porque «aquí no hay corcholatas, hay estatutos y son cuatro formas de hacerlo», la realidad es que hay dos aspirantes que son mujeres la diputada federal Ana Lilia Herrera y la secretaría de Desarrollo Social, Alejandra del Moral en el  PRI hay hombres y mujeres para encabezar el partido, pero todo a su tiempo, con base en los estatutos y maneras.

El PRI enfrentará toda una maquinaria federal en busca de ganar el Estado; la imposición en Morena de Delfina, es una muestra de con quien se enfrentarán en el 2023 y 2024. El tricolor buscara mantener el Estado a pesar de un mal gobierno de Alfredo del Mazo.

A pesar de las encuestas que dan como triunfador a Morena,  el PRI cuenta en el Estado de México con una estructura bien definida y en caso de ir en alianza necesitarán de todos los partidos para impedir ganar el único bastión que le queda al tricolor, es decir se juega su última carta para seguir existiendo o es su desaparición.

Sin embargo, el PRI enfrenta un descrédito desde lo alto del gobierno federal hacia su líder nacional al ser atacado y acusado por la oposición de enriquecimiento ilícito, mientras que sucede lo mismo con el PAN estatal y en una alcaldía de la Ciudad de México, es decir que los únicos buenos y santos son los morenos.

Por Pepe Toño